Feliz día del Maestro.
Muy estimados y respetados profesores:
Quisiera comenzar con las palabras que el Santo Padre se dirigió a los profesores católicos en Washington,”¡Qué hermosos los pies de los que anuncian el Evangelio!" (Rm 10,15). Con estas palabras de Isaías, citadas por san Pablo, saludo calurosamente a cada uno de ustedes, portadores de sabiduría”.
Estamos recordando una fecha importante y es de justicia de enviarles nuestro respeto y admiración, por el don maravilloso de ser educadores.
Enmarcados en esta gran tarea que tienen, quiero alentarles con las palabras del Santo Padre que nos dice: El deber educativo es parte integrante de la misión que la Iglesia tiene de proclamar la Buena Noticia. En primer lugar, y sobre todo, cada institución educativa católica es un lugar para encontrar a Dios vivo, el cual revela en Jesucristo la fuerza transformadora de su amor y su verdad (cf. Spe salvi, 4).” Estas palabras nos llevan a renovar nuestro compromiso que asumimos al elegir esta delicada misión. No podemos ser como unos maestros desde el punto de vista humanos, estamos enmarcados en un nivel mayor, de encaminar a sus estudiantes al encuentro personal con Jesucristo, esto compromete en una tarea en la que debemos redoblar esfuerzos.
Que este año sea de mucha ilusión y de mucha esperanza en la formación que les toca realizar, que La Virgen los ampare con su manto y Dios los bendiga.
Pbro. Edward Huillcen Baca
Vicario Episcopal de Educación
Director de la ODEC
